Si viniese
hasta aquí solo, a decir- verdad, nunca sabría que decir y así me iría
Si no
tuviera que explicarte esta sonrisa, de veras amor, que nunca hubiera llegado
Si mi deuda
con tus manos se saldara de rodillas, no lo dudes, ya me habría arrodillado.
Con todo lo
que tengo me desvisto cada noche y como es poco te lo doy, porque es todo,
te lo doy
para dejarle hueco a lo que venga y a los besos que no he dado y a las noches que
nos quedan por equivocarnos, pecado, capital de otro planeta. Llegamos.
La vida da
tantas vueltas que acaba por marearnos, cariño, y yo, pienso vomitar encima
tuya, insisto, esta mezcla de silencio y piel erizada de invierno de puerta
cerrada de botella de ron derramada de quererte, en cama y de rodillas con
una...sonrisa en la cara.
Y todas esas
gracias, por las que vine a verte.
"Vuelve
No soy tan
fuerte..."
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